Perder la serenidad es perder la batalla.
Una persona no se vuelve serena con el simple deseo de quererlo, si así fuera nadie haría el ridículo mostrando su falta de habilidad para controlar sus emociones, la serenidad se practica, y nos hace "todo un paro"; para ser sereno hay que tener valentía, fuerza, garra, psicología, intelecto, serenidad es usar la cabezota y la narizota para respirar las cosas y "airarlas" para pensarlas mejor, los impulsos limitan a nuestra inteligencia del "chance" de observar TODAS las opciones que tenemos.
Al ser serenos nos estamos haciendo un paro... hazte un paro y respira.
#yosiempretengoganas
#mividacomolasoñé